Los bebés prematuros y pequeños nacidos por cesárea tienen un riesgo 30 por ciento más elevado de problemas respiratorios graves que los que nacen por parto vaginal, halla un estudio reciente.
El síndrome del distrés respiratorio, que afecta sobre todo a recién nacidos prematuros y que puede conducir a problemas respiratorios persistentes, ceguera y daño cerebral, fue más común entre los bebés nacidos por cesárea, hallaron los investigadores.
"Diría que por lo menos mostramos que quizás la cesárea no tenga ningún beneficio en los partos prematuros, y que se necesita más investigación antes de que la tasa de cesáreas aumente aún más", señaló la líder del estudio, la Dra. Erika Werner, profesora asistente de medicina materno fetal de la Escuela de Medicina Johns Hopkins, en Baltimore.
Entre 2002 y 2009, las cesáreas aumentaron de 27 a 34 por ciento de todos los nacimientos de EE. UU., según un informe de HealthGrades. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU. reportaron recientemente un descenso a poco menos de 33 por ciento en 2010.
Grupos como el Congreso Americano de Obstetras y Ginecólogos (American Congresss of Obstetricians and Gynecologists) intentan limitar el número de cesáreas, pero sin mucho éxito.
"Estoy muy consciente como médica de que la tasa de cesáreas está en aumento, y estudios anteriores arrojaron resultados realmente mixtos", apuntó Werner. "Algunos han sugerido un mayor riesgo de sangrado cerebral o un mayor riesgo de muerte en esta población con el parto vaginal. Así que realmente deseaba observar una población contemporánea y diversa".
Los investigadores analizaron los datos de nacimiento de 2,560 bebés pequeños para su edad gestacional que nacieron entre las 25 y 34 semanas de embarazo en hospitales de la ciudad de Nueva York de 1995 a 2003. (Antes de las 37 semanas se considera prematuro). El 46 por ciento nacieron vaginalmente y 54 por ciento mediante cesárea. El estudio solo observó los nacimientos vivos, y excluyó a las madres que habían tenido una cesárea anteriormente.
Los partos vaginales que utilizaron fórceps o un vacío se excluyeron del estudio, pero por lo general no son un factor con recién nacidos tan pequeños, explicó Werner.
El estudio no halló diferencias en la incidencia de sangrados cerebrales, convulsiones o septicemia entre los dos tipos de parto. Aunque los bebés nacidos por cesárea tenían puntuaciones Apgar (una medida de la salud del recién nacido) más bajas, la diferencia no fue significativa tras tomar otros factores en cuenta. Pero el riesgo más elevado de síndrome de distrés respiratorio se sostuvo.
El estudio fue presentado el jueves en la reunión anual de la Sociedad de Medicina Materno Fetal (Society for Maternal-Fetal Medicine), en Dallas.
La Dra. Diane Ashton, subdirectora médica de March of Dimes, no participó en el estudio, y aseguró que los resultados se hacen eco de otros hallazgos recientes.
"Este estudio en particular muestra que en los bebés que son prematuros y pequeños para la edad gestacional, que se tiende a pensar que son bebés más bien frágiles, la cesárea no ofrece ninguna protección contra los resultados adversos", apuntó Ashton.
En general, la postura de March of Dimes "es que los partos electivos (que incluyen las cesáreas y las inducciones) no deben ocurrir en bebés nacidos antes de las 39 semanas a menos que exista una indicación médica", señaló.
"En los casos en que hay una fuerte indicación médica, ya sea debido a la salud de la madre o la del feto, creo que es importante que las mujeres comprendan que se trata de una cirugía mayor y que puede asociarse con complicaciones", añadió Ashton.
Werner dijo que su equipo realizó un estudio similar con bebés prematuros cuyo peso caía dentro del rango normal. "Tuvimos resultados muy similares, aunque el distrés respiratorio fue incluso más impresionante, y hubo más beneficio con el parto vaginal", dijo.
Ashton apuntó que el parto vaginal ayuda a que el bebé respire. "El proceso de parir un bebé vaginalmente, pasar por el canal de parto y que el líquido amniótico salga de los pulmones puede mejorar el estado respiratorio", explicó.
Aunque el nuevo estudio encontró una relación entre las cesáreas y los problemas respiratorios en los bebés prematuros, no prueba que exista una relación causal.
El estudio usó certificados de nacimiento y datos de las altas hospitalarias. "No sabemos si las cesáreas simplemente se dan más en una población en más riesgo de distrés respiratorio o si las cesáreas provocan distrés respiratorio. No podemos decir qué ocurre primero a partir de este tipo de estudio", comentó Werner.
Ashton apuntó que no es demasiado pronto para que estos hallazgos, y otros similares, afecten la práctica.
"Ciertamente debe haber algo de revisión, y quizás recomendaciones del Congreso Americano de Obstetras y Ginecólogos, sobre dónde creen que la práctica debe cambiar", planteó Ashton.
Los datos y conclusiones de estudios presentados en reuniones médicas deben ser considerados como preliminares hasta que se publiquen en una revista médica revisada por profesionales.
Artículo por HealthDay, traducido por HispanicareFUENTES: Erika Werner, M.D., assistant professor, maternal-fetal medicine, Johns Hopkins School of Medicine, Baltimore; Diane Ashton, M.D., M.P.H., deputy medical director, March of Dimes; Feb. 9, 2012, presentation, Society for Maternal-Fetal Medicine annual meeting, Dallas