lunes, 12 de septiembre de 2011

La inteligencia de los lactantes

Bebés que toman leche materna tendrían mayor capacidad cerebral

Por Genevra Pittman

En un nuevo estudio realizado en Gran Bretaña, los niños alimentados con leche materna en los primeros meses de vida obtuvieron resultados más altos en test de vocabulario y razonamiento a los 5 años que los que no habían sido amamantados.

Y la diferencia era mayor en los niños amamantados que habían nacido prematuramente.

"La leche materna contiene ácidos grasos esenciales, que son buenos para el desarrollo celular y de la capacidad intelectual", explicó Amanda Sacker, coautora del estudio, del Instituto para la Investigación Social y Económica de la University of Essex.

O "podrían existir diferencias en las hormonas y los factores de crecimiento que no contiene la fórmula (...) La tercera es una teoría puramente social: quizás a los bebés que los amamantan los abrazan más y esto les confiere alguna ventaja", añadió la experta.

El estudio no prueba que la lactancia haya mejorado la capacidad cognitiva en los niños, ya que, por ejemplo, los autores no contaron con información del coeficiente intelectual (CI) de los padres, lo que habría influido en si las madres habían amamantado o no a sus bebés y en el rendimiento de los niños en los test cognitivos.

Pero los resultados, publicados en The Journal of Pediatrics, apuntan a una relación causa-efecto, según precisó Sacker.

Los datos surgen de 12.000 bebés nacidos en el Reino Unido entre el 2000 y el 2002.

Cuando los bebés tenían 9 meses, y en una segunda consulta, se les preguntó a los padres si habían amamantado a sus hijos y hasta qué edad. A los 5 años, a los niños se les realizaron test de vocabulario, razonamiento y habilidad espacial.

Seis o siete de cada 10 bebés habían sido amamantados. Los niños a término y prematuros tendieron a rendir mejor en las pruebas si habían sido amamantados.

Los chicos nacidos a término y amamantados durante cuatro a seis meses estaban unos meses más avanzados en los test de vocabulario y razonamiento que los niños no amamantados.

Lo mismo ocurrió con los prematuros que habían sido amamantados durante dos meses, comparado con los otros 11 prematuros a los 5 años de edad. En los que habían sido amamantados durante cuatro meses se observó un refuerzo del vocabulario.

"Estas diferencias son muy pequeñas", dijo Sacker. Sin embargo, para "los niños que nacen con una desventaja, las brechas tienden a aumentar y no a reducirse con la edad".

El doctor David McCormick, pediatra de la University of Texas Medical Branch, en Galveston, indicó que la lactancia beneficia al sistema inmune, el desarrollo y la función cerebral. "Tiene muchas más ventajas que la del CI", indicó el especialista, que no participó del estudio.

FUENTE: The Journal of Pediatrics, online 11 de agosto del 2011

domingo, 11 de septiembre de 2011

Lactancia materna y epilepsia infantil

La lactancia materna se asocia a un menor riesgo de epilepsia en la infancia

Población de estudio: recién nacidos seguidos durante 5-11 años (mediana de 7,5 años), que hayan nacido entre 1997 y 2003, y con seguimiento hasta 2008. Se incluyen inicialmente 70 270; se excluyen 94 por falta de datos sobre lactancia y 426 por falta de datos sobre tabaquismo o paridad, quedando 69 750 para su análisis.


* IRR: Riesgo Relativo de la Incidencia

La epilepsia infantil es una enfermedad crónica y, aunque puede tener buen pronóstico en la mayoría de los casos, representa un padecimiento preocupante para el paciente y su familia. Pocos factores de riesgo para el desarrollo de epilepsia pueden considerarse modificables (preeclampsia, malformaciones congénitas, complicaciones perinatales), pero la lactancia materna podría ser uno. La lactancia se ha asociado a otros beneficios neurológicos a largo plazo.

Los estudios que evalúan la asociación entre lactancia y epilepsia son pocos.


Se trata de un estudio de cohorte, en un país industrializado (Dinamarca) con una base de datos nacional, y con una muestra de casi 70 000 niños. La información obtenida se basa en encuestas telefónicas a los seis y a los 18 meses, y en los registros nacionales. El seguimiento fue al menos de cinco años. Los autores tomaron en cuenta variables de confusión para el riesgo de epilepsia, hicieron ajustes y análisis de subgrupos. Debido a la relación temporal que puede existir para el desarrollo de epilepsia (es decir, un niño mayor tendrá mayor oportunidad de desarrollarla), los resultados se expresaron como IRR*.

Los niños que recibieron lactancia materna más de un mes tuvieron menor riesgo de desarrollar epilepsia al compararlos con niños que recibieron lactancia materna un mes o menos. El IRR fue disminuyendo a medida que fue aumentando la duración de la lactancia, y esto fue más notorio cuando existía lactancia exclusiva. Cuando fueron alimentados con leche materna durante 3-5, 6-8, 9-12 y más de 13 meses, tuvieron un riesgo de epilepsia un 26, un 39, un 50 y un 59% menor, respectivamente, después del primer año, al compararse con los alimentados con leche materna durante menos de un mes. Esta asociación permaneció cuando se excluyeron niños que tuvieron condiciones adversas prenatales, perinatales o neonatales que pudiesen fungir como confusores. Además, puede sugerirse causalidad por la fuerza de la asociación, la consistencia con otros estudios, la dosis-respuesta, y la plausibilidad biológica.

Fuente: Pérez Gaxiola G, Cuello García CA. La lactancia materna se asocia a un menor riesgo de epilepsia en la infancia. Evid Pediatr. 2011;7:67.

martes, 6 de septiembre de 2011

Adiós teta, adiós

Bien, pues parece que ha llegado el momento, Samuel ha dejado la teta.

Hace un mes y medio pensaba que cada vez Samuel mamaba más y fíjate, ahora mirándolo desde otra perspectiva, supongo que fue el típico subidón antes de destetarse.

En este destete progresivo y pausado, por su parte, aunque también tengo que decir que yo lo he recibido de buena gana, ha tenido mucho qué ver lo que hemos estado haciendo durante las breves, pero intensas, vacaciones.

Asistimos al I Foro de Maternidad y Paternidad de Jaca, en el cual, nos turnamos para estar con Samuel, así mientras uno escuchaba las ponencias, el otro atendia al pequeño terremoto y al contrario.
Mónica, una chica de Jaca, montó un espacio super completo dentro de una de las aulas del colegio donde tuvo lugar el encuentro y allí lo pasamos muy bien.


Al haber otros niños, Samuel solía estar, tanto conmigo, como con su padre, entretenido con los nuevos juegos o persiguiendo a sus iguales.

Y así pasaban los dias, tomando pecho sólo al despertarse de la siesta o cuando se dormia por la noche.
Al estar tan cansado tampoco tenia despertares nocturnos, con lo cual, la lactancia se vió muy disminuida.

Cuando volvimos de Jaca, me dolía el pecho cuando mamaba, bueno, era solo la primera toma de contacto, luego ya bien, y yo pensaba que igual no habia mucha y tenia que apretar más...me apreté el pecho y no salió ni una gotita blanca...

Bueno, y así seguimos otra semana más.

Después volvimos a salir de viaje de negocios/placer hacia Palazuelos de Muñó, Burgos.
Allí asistimos a un encuentro de familias que educan (o tienen intención) de educar en libertad y allí se lo pasó todavia mejor: habia piscina, juegos, tierra, muchos más niños...
Tres cuartos de lo mismo, después de la siesta, si la habia o para dormir, aunque durante los dias que estuvimos allí y casi hasta final de Agosto, muchas veces lo ha dormido Ernesto en el mei o en el coche, porq con tanto trajín, le costaba mucho encontrar un momento de tranquilidad para dormirse por si mismo.

Así que cada vez ha ido mamando menos, menos y menos y a mi cada vez me dolía más...
Supongo que si no tienes ya leche o tienes muy poca, debe ser normal que moleste la presión en el pecho. Además de la sensibilidad añadida del nuevo embarazo.

Yo, que quereis que os diga, no estoy triste.
Cada época tiene sus cosas, igual que no estoy triste de haber dejado atrás la vida de "soltera", de universitaria, de...
Y sobretodo, me parece que tiene mucho que ver, el que viene un nuevo cacau que tomará pecho de nuevo.
He leido varios escritos sobre mamás que han dado o dan lactancia en tandem y...no es lo mio.
Podriais decir que cada experiencia es única, que igual a mi me podria gustar, pero y si no? No hay vuelta atrás, no podria negarle el pecho a Samuel justo al nacer el nuevo bebé si no me siento bien.

En fin, así es como han salido las cosas, no creo que yo haya influido especialmente, simplemente, lo acojo como un proceso más de la vida de mi hijo.

Perdonad las mayúsculas pero me siento orgullosa de poder escribir, que tras los terribles comienzos con el pecho, hemos llegado a los 23 MESES DE FELIZ LACTANCIA MATERNA!!!



domingo, 4 de septiembre de 2011

La decisión no es por salud

Hace un par de semanas, cuando salimos de la consulta ginecológica del Hospital de Alcorcón, habiendo visto a nuestro cacahuete en la eco, estábamos tan contentos que decidimos que ya era hora de contarles a nuestros amigos íntimos la buena noticia.
Les llamamos para ver qué tal estaban ellos, porque también están esperando a (nada más y nada menos) su tercer hijo! Y además es un niño después de haber tenido dos preciosas niñas anteriormente.
Bien, ahí estábamos metidas en nuestra conversación, cuando me dice..."Pues yo me estoy pensando no darle pecho, darle biberón directamente"
...
...
...
Qué???
Me quedé totalmente alucinada.
"Pero mujer, por lo menos los tres primeros meses, que eso le da muchas defensas..." le decia yo.
Supongo que me vió tan sorprendida (y no se si se me notaba indignada) que al final me dijo..."Bueno, lo estoy pensando....Pero de todas formas, es una decisión personal".

Decisión personal???? De quien? Tuya, no?
O la decisión personal la toma el bebé?

Ay, madre, hubiera sido mejor que no me lo contara.
Qué puedo hacer para que entre en razón?

Nada más llegar a casa, me puse a buscar en el blog sobre las investigaciones relacionadas con la lactancia materna, que he publicado durante este año.
También algunas de las cosas que he leido ultimamente en otros blogs.
Hice un word para imprimir y llevarles cuando vayamos a nuestra tierra.

Hasta ahí todo bien.

Al poco recibimos la visita de unos amigos, con los que compartimos bastantes valores, entre ellos la importancia de la lactancia materna y hablando con ellos, me hicieron ver que lamentablemente, nuestros amigos o nuestra amiga de familia numerosa, no toma la decisión por temas de salud, no toma la decisión por falta de información, no toma la decisión pensando en su bebé...que triste es pensar esto de alguien a quien aprecias, pero yo tengo que decir que me siento engañada y defraudada y NO, no pienso que sea una buena madre.
No hay ninguna razón física que le impida dar el pecho, de hecho lo ha hecho con sus dos hijas anteriores, solo fueron tres meses, si, pero ya fue algo.

Finalmente he decidido imprimirles el documento con algunos de los beneficios pero se lo dejaré en la mesa para que ellos decidan si lo leen o no.
Los dos, porq aunque la decisión parece que solo la toma ella, el hijo es de ambos y ambos deberian por lo menos estar de acuerdo o saber qué implica cada decisión.

Pero no puedo evitar de preguntarme...No es el niño de sus ojos? El que con tantas ganas esperaban? No va a ser tan preciado como para "sacrificarte" por él durante tres meses, no pudiendo separarse de su lado (en principio) ese tiempo?
No me lo explico.